El egosurfing es una práctica recomendada para quienes buscan proteger sus datos privados, pero sobre todo en las empresas, como parte de una revisión periódica. De hecho, la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI), advierte sobre la importancia de realizar de forma periódica este ejercicio.
El organismo explica que “todo lo que publicamos en Internet; fotos, vídeos, opiniones, etcétera, e incluso lo que otros publican sobre nosotros, incluyendo documentación o publicaciones oficiales, donde aparece información sobre nosotros, permanece en la red”.
Ya que el conjunto de estos datos componen la huella digital personal, la misma puede ser dañada según el tipo de información que se encuentra sobre cada uno. Además, esto también puede traer un problema de reputación, como así también la vulneración de la privacidad.
Egosurfing: qué es y por qué es necesario practicarlo
Seguramente te has preguntado qué aparece cuando buscas tu nombre en Internet. Si te ha picado la curiosidad, y lo llevaste a cabo, ¡pues has hecho egosurfing! Pues eso es justamente este procedimiento.
De hecho, el significado de egosurfing proviene de ‘ego’ del latín “yo”, y ‘surf’ del inglés “navegar por Internet”. Esta práctica es muy recomendable para la seguridad de nuestros datos porque no cuesta tanto tiempo y se puede hacer con conocimientos básicos de informática.
Como ya te hemos adelantado en el inicio, es muy relevante conocer y proteger la información que hay sobre nosotros y nuestra empresa en la Red. Lo mismo aplica en los casos donde es necesario realizar una limpieza de nuestra huella digital.
Por eso, el concepto se trata de buscar los propios datos empresariales para controlar su identidad online. Así mismo, es muy útil para proteger también la reputación de la misma o información que no debería ser pública.
La Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) advierte sobre la importancia de realizarlo de forma periódica. “Internet es el mayor banco de información de la historia y puede haber contenido privado o inapropiado sobre nosotros circulando por la red, aunque no seamos conscientes de ello”, afirman desde el organismo.
También se lo suele llamar un estilo de “revisión médica” para conocer cuál es la salud de su identidad pública y prevenir los problemas que pueda generar nuestra información.
Por último, se corre el riesgo de que acaben en malas manos los datos privados y puedan llegar a ser publicados o utilizados para realizar fraudes, chantajes u otros delitos. Consideramos necesario advertir que puede existir información personal que se filtre al rellenar un formulario en un enlace malicioso o sufrir el ataque de un virus o malware.
¿Cómo podemos hacer egosurfing en nuestra empresa?
Hay diferentes formas de hacer egosurfing para proteger los datos de tu empresa. Cada una de estas estrategias puede ayudarte a investigar y rastrear qué es lo que está circulando en internet para saber qué decisiones tomar. Te las explicamos a continuación.
Buscador de Google
Aunque esta es una de las prácticas más comunes y sencillas, no deja de ser una herramienta clave en el egosurfing. La misma consiste en buscarnos directamente en el buscador de Google poniendo nuestro nombre, apellidos u otros términos como los identificados en el apartado anterior de Google Alerts.
Además, Google imágenes también te permite realizar búsquedas de imágenes concretas. Por ejemplo, puedes encontrar rastros de fotos de tus perfiles o imágenes compartidas con otras personas de forma confidencial.
Google Alerts
Esta herramienta de Google nos permite configurar el envío de notificaciones a nuestro correo electrónico sobre cualquier tema que nos interese. Es una gran forma de investigar tu huella digital, si bien requiere algo de tiempo.
Para hacerlo, debes seguir los siguientes pasos:
- Acceder al enlace ‘https://www.google.es/alerts’ o buscar ‘Google Alerts’ directamente en el buscador.
- Ahora bien, debemos introducir en la barra de búsqueda el concepto o términos sobre los que queramos establecer la alerta.
Dentro de la práctica del egosurfing puedes hacer búsquedas sobre los siguientes datos personales:
- Nombre y apellido/s: «Manuel Ejemplo»
- Apellido/s seguido del nombre separado por una coma: «Ejemplo, Manuel»
- Nombre y apellido, más la ciudad (fuera de las comillas): «Manuel Ejemplo» Madrid.
- Dirección: «Calle Ejemplo, 017».
- Dirección postal, más ciudad (fuera de las comillas): «Calle Ejemplo 017» Madrid.
- Dirección de correo electrónico: anonym@ciberseguridadtips.es569.
- Número de teléfono (con o sin espacios y guiones): «123456789».
- DNI: “01234567A”
Sin embargo, es importante que al buscar estos datos lo hagas usando entrecomillas (“”). Así los resultados que obtendrás serán aquellas páginas web que contengan exactamente las palabras que hemos buscado y en el mismo orden. Por lo tanto, ignorando las páginas webs con resultados similares o solo una parte de nuestra búsqueda.
- Finalmente, puedes configurar diferentes opciones, como cuándo quieres recibir las notificaciones o si las quieres agrupadas. Puedes considerar también otros factores como el idioma o el ámbito geográfico.
Aquí la estrategia es muy similar a la de la búsqueda en el navegador, ya que solo debes escribir el nombre de tu empresa en cada una y encontrar qué es lo que hay publicado. Es fundamental hacerlo en todas las redes sociales, tengamos o no cuenta en ellas porque podrían aparecer perfiles falsos que publiquen contenido en nuestro nombre.
En este sentido, es una buena práctica también intentar con diferentes combinaciones del nombre de nuestro negocio. Por ejemplo, si el nombre tu empresa de ropa infantil es “limoncito.indumentaria”, y nuestro perfil en Instagram es @limoncitoindu, podríamos hacer búsquedas como: @indu_limoncito, @indumentarialimoncito, @limoncitoindu o @Iimoncitoindumentaria.
Probablemente, en este último, no hayas notado la diferencia, pero la <<l>> de limoncitos se ha sustituido por una <<i>> mayúscula. Esto puede hacer pasar desapercibida diferencia, de forma que los ciberdelincuentes engañan a nuestros clientes haciéndose pasar por tu empresa.
Al suplantar tu identidad, pueden pedirles a tus clientes los datos personales en nuestro nombre o haciéndoles caer en phishing (fingiendo, por ejemplo, que han ganado un sorteo), desprestigiando así el nombre de tu empresa.
¿Qué pasa si no quieres que aparezca lo publicado?
Puede ocurrir que una vez que hagas tu egosurfing, encuentres datos o imágenes que no se quieren mantener en la red. En este caso, se puede hacer uso de distintas herramientas según las características de la información. Te las resumimos a continuación:
- Configurar las opciones de privacidad de las redes sociales.
- Si se encuentra un perfil falso, denunciarlo a la red social para que sea eliminado cuanto antes.
- Ejercer el derecho al olvido si los datos o imágenes han sido publicadas por terceras personas e instituciones y afectan de manera negativa a la identidad digital y la reputación.
Vamos a lo puntual. Si la información fue publicada por nosotros mismos, lo más sencillo es eliminarla de la plataforma donde aparece.
Y lo mismo ocurre si, aunque no la hayamos publicado nosotros, se encuentra en nuestros perfiles sociales. Por ejemplo, es muy común encontrar un comentario malintencionado o una publicación en la que se nos ha etiquetado sin nuestro consentimiento. Para esto, incluso es posible configurar nuestros perfiles para bloquear cierto tipo de comentarios y evitar que nos etiqueten en publicaciones sin tu permiso.
Sin embargo, si la información no la hemos publicado nosotros y vulnera nuestra privacidad y/o reputación, podemos seguir los siguientes pasos:
- Solicitar directamente al responsable/administrador que rectifique o elimine dicho contenido. Para ello, deberás demostrar la inexactitud de los datos, o bien que estos afectan al honor y reputación. Este último, siempre y cuando no prevalezcan los principios de publicidad registral y de interés público.
- Si entendemos que dicha difusión de los datos empresariales pudiera ser constitutivo de delito, incluso podríamos interponer una denuncia por delito contra el honor de tu empresa.
Para finalizar, si encontramos un perfil falso que se hace pasar por nosotros, la solución definitiva es denunciarlo inmediatamente a la red social. Puedes hacer esto a través de los canales de soporte oficiales en la que se encuentre para que lo eliminen lo antes posible.
Conclusión
El ecosurfing permite tener un control de la información de tu empresa que está expuesta en la Red, conocer tu huella digital y la imagen que proyectan. También puede ayudarte a saber si te están suplantando, lo cual es suficiente para realizar este ciberchequeo regularmente.
Este ejercicio, junto a otras medidas de protección como utilizar contraseñas robustas, clasificar y cifrar la información, o bloquear tus dispositivos te ayudarán a mantener a salvo la privacidad de tu empresa.